Son cuatro chicos granadinos, Iván, Álvaro, Sergio y Paco, que, como ellos dicen, fueron educados en el respeto por nuestro Planeta.
Se han propuesto pedalear desde Andalucía hasta llegar a la Toscana este verano, en 25 etapas. Salieron el 15 de julio. El proyecto se llama Pedaladas por la Vega.
Su propósito es difundir los valores ecológicos de la Vega de Granada, hilando hermanamientos con otras vegas por el camino.
Estos chicos tuvieron la suerte de contar con profesores extraordinarios, que les involucraron en una iniciativa pedagógica ejemplar: Vega Educa, uno de los proyectos de aprendizaje-servicio de mayor envergadura que conozco.
De hecho, lo más intenso y complejo del itinerario ya lo han resuelto, porque empezaron a transitar de la educación al compromiso social y del compromiso social al compromiso político.
Hace apenas unos días estuve paseando por el nuevo camino que va de Bellvitge hasta el río Llobregat y ví decenas de conejos saltando por las orillas. El río todavía no está lo que se dice limpio, pero ha mejorado muchísimo. Esto es esperanzador.
Pensé en los chicos y su propósito de hermanamiento: ojalá nos contagien a todos su determinación.